Continúa el juicio por uno de los acontecimientos más negros de la historia de la provincia: la sedición policial que generó los saqueos de diciembre de 2013.
El 8 de diciembre, los integrantes de la Policía comenzaron con una huelga por un reclamo salarial que se extendió hasta el 11 de ese mes. Durante esos días, aprovechándose de que los habitantes de la provincia estaban desprotegidos, una horda de delincuentes comenzó a saquear todo lo que encontraba en su camino. Los vecinos, en cambio, se armaron y colocaron barricadas para protegerse de los vándalos. En resumen: la provincia quedó envuelta en un profundo caos.
El ex ministro de Gobierno, Seguridad y Justicia, Jorge Gassembauer fue el primer testigo en declarar en el histórico debate. Se deslindó de responsabilidades y consideró que la responsabilidad de terminar con la situación correspondía al jefe de policía.
Entre muchos “no recuerdo”, Gassenbauer señaló que él no podía darle órdenes al jefe de policía de reprimir el alzamiento policial que sumió a la provincia en el caos.
Indicó que su actividad en esas horas desesperantes se limitó básicamente a reunirse con sus funcionarios y acordar pedir una orden judicial de desalojo, además de requerir el auxilio de las fuerzas federales. Pero desconoce cómo se cumplieron esas premisas ni cuánto tiempo después.
